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martes, 20 de agosto de 2013

Minas de Rio Tinto


Buenas, os habíais pensado que me había olvidado de vosotros , pues no es así, lo único que no he encontrado nada que contar, o no he estado lo suficientemente inspirado, como para crear una entrada.
Bueno después de la disculpa os cuento.
Este pasado mes de Julio he andado por la tierra de mis antepasados, y como yo no soy mucho de playa, algún día nos hemos ido a la sierra, donde también hay cosas que ver.


Pues eso, nos hemos ido a ver, posiblemente uno de los parajes mas inhóspitos y a la vez mas bellos de la península, las Minas de Rio Tinto


Como no, para conocer la zona hemos empezado por el mismo museo, en el que te puedes informar de toda la historia de las minas de Huelva, ya explotadas por los romanos, y mas concretamente las de Rio Tinto.


No hay fotos del interior, ya que no se deben hacer y como yo eso siempre lo respeto, pues tendréis que ir a verlo, tienen hasta una replica de una mina romana, con sistema de extracción y todo, impresionante


Después de visitar el museo, vamos a una de las minas que es visitable, con guía, y donde nos explicaran el porque del color rojo del rió y como explotaban la zona



Antes de entrar a la mina y repartir los cascos, el guía nos cuenta alguna curiosidad, como que los mineros daban de comer a las ratas, ya que estas eran las primeras en salir corriendo si había algún movimiento de tierra, y eran el sistema de alarma, en caso que algún desprendimiento, y así salir pitando ellos también


Una vez atravesado el túnel, donde se estaba la mar de fresquito, dábamos con la corta, nacimiento del Rio Tinto


Podíamos observar el rojo de sus aguas, que durante muchos años se pensó que eran aguas contaminadas, y resulta que son naturales , por "culpa" de una bacteria.


Detalle de la estructura que soporta el peso del túnel


Dentro de la misma galería, también se realizaban extracciones de interior, llegando a los 600 metros de profundidad, todas ellas hoy en día inundadas.


Saliendo de la mina nos dirigiremos de nuevo al coche , para ir a coger el tren, que nos llevara por las explotaciones y estaciones donde se recogían los minerales para llevarlos al puerto.


Pero antes de ir al coche, vemos algunos detalles de la zona de la boca mina


El agua, todavía verde por unos microorganismos llamados euglena mutabilis


Por ahí pasaban  los vagones para ser cargados


Lo que queda de ellos


Como siempre la vida se abre camino


Llegando a la estación donde cogeremos el tren, el paisaje cambia muy mucho.


Y aquí el tren, es eléctrico, aunque en otras épocas del año, utilizan una maquina a vapor, pero por razones de seguridad en verano, la tienen guardada.


Antes de montarnos y desde el anden se ven algunos de los ramales, que acaban en la vía principal, y que llegaron a ser mas de 260 kilómetros


Y el protagonista de la excursión el Rio Tinto, que desemboca en Huelva,y acompaña al tren en varios de sus 84 km de vias .


El terreno es totalmente árido



Ya en el tren y nada mas empezar pasamos junto a las escolleras, donde todavía se pueden ver las formas de los vagones


 Para que os hagáis una pequeña idea, de la cantidad de material que se saco de estas minas durante su explotación

 deciros que estas son las montañas formadas por la escoria.



En los primeros kilómetros se ve que la naturaleza poco a poco va ganando terreno a lo que un día fue suyo.




Pasamos junto a viejos vagones, todavía en sus raíles, y que si seguirían funcionado, andarían mas de 7 kilómetros , para llegar al final de su destino.


ya mas adentro vemos otras zonas de explotación


Y llegamos a la Estación de las Zarandas, donde no vemos mas que oxido, y a estos grandes titanes, esperando a ser restaurados, por la Fundación RioTinto, que es la encargada de gestionar todo lo relacionado con el parque minero, que es como lo denominan ellos.







Seguimos trayecto y pasamos junto a planos inclinados



Antiguos puentes que unían las zonas de trabajo con la vía principal



También encontramos algunos restos que no cuadran con el lugar


Imagen del tren, que por cierto eran los vagones originales que se usaban para llevar a los pasajeros


Zona de terrazas



Rio, que parece una tuberia oxidada.


en esta zona , aunque parezca desierta y sin vida animal, se encuentran corzos , jabalís , zorros, y utilizan el agua del rio , no para beber, sino para desparasitarse , ya que su PH es de 2,5 y así consiguen matar a los parásitos, eso si salen un poco rojillos.






Llegando al final del trayecto de ida, estación de los Monjes, el rió se ensancha algo, y para ser finales de julio, lleva bastante agua.



En la estación, mientras el tren hace cambio de sentido, nos dejan acercarnos al rió




 Nos recomiendan que no metamos la ropa al rió, ya que seria como meterlo en lejía.


Y que el olor no ha sido el de al lado, que es del azufre que hay sobre las piedras.


Ya de vuelta nos relajamos y disfrutamos del paisaje


Los bancos eran reversibles, con solo mover el respaldo, te ponías en la dirección que quieras, incluso se podía echar una partidilla de mus, eso si nada recomendables para viajes largos.


Detalle del vagón


curva peligrosa


Otra de las cosas curiosas de esta zona , es que los de la N.A.S.A. si esos mismos, están privando los prototipos de vehículos que mandan a Marte, aquí en estas aguas, ya que piensan que las condiciones son muy parecidas, a las del planeta rojo.



Dentro del agua hay grandes concentraciones de Zinc (30mg/l) y cobre (5 mg/l) y aunque parezca mentira de hierro solo (0,5mg/l)


El maquinista obedece todas las señales, estas solían estar a las entradas de las estaciones y zonas de trabajo.


Detalle de vías y zonas de trabajo


M de mina


Y puente de Hierro


Ya solo me que da recomendaros la visita a esta zona, es como estar en Marte, pero sin tener que gastarte tanto dinero para ir, y no esperar tanto tiempo para llegar.
Otra recomendación es que hagáis las visita en cualquier época del año , ya que el paisaje es siempre precioso, con los contrates de cada época, eso si, si vais en veranito , ir por la mañana.


Queda dicho.
Por lo demás como siempre agradeceros que halláis llegado hasta aquí, y que no tengáis que esperar tanto tiempo para saber de mi.

Un saludo


JOSE

4 comentarios:

  1. Claro que sí. Algo diferente al turismo de masas. Minas abandonadas. Seguro que algo te sonaría.

    Qué pena de máquinas oxidadas. Bueno, mejor así.

    Vuelves a tus raíces, como en la serie de TV "Roots" (años 70). Alex Haley buscó a su antepasado en el río Gambia. Tú los puedes buscar en el Tinto y el Odiel.
    Armando

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  2. Bonito reportaje xeantonio.

    Ondo segi

    Azbarren

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  3. Jose, ¿por qué no he visto este repor antes?.

    Interesante y curioso. Cerca de casa tienes otro agujero considerable del que alguna galería pasa por debajo de la plaza esa que tenéis.

    Un abrazo y nos vemos.

    Alberto.

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  4. Por que no me avisastes que bajabas al Sur y me hubiera echo unos cuantos km para conocernos, eso no se hace hombre. Para tu información hay unas visitas a este mismo sitio, muy privadas que te dejan ir a donde no puede llegar el visitante, es decir, son visitas que no anuncian en las guía de Río Tino, si no, que son visitas que tu haces en grupos muy reducidos y tienes que pedir un permiso especial, es decir, son minas abandonados que no puede visitar el público a no ser como he dicho anteriormente sea con un permiso especial. Y esas si que me molan a mí, para mi afición y mi futuro trabajo. Hay un grupo en Córdoba que las va a hacer, si te quieres apuntar no tienes nada más que decirmelo.
    Y al final José no voy a hacer lo de las rutas por que la empresa por la cual iba a trabajar no me asegurba que tuviera seguro por sí ocurriese algo en mis rutas, por que si ocurriese algo el marrón me lo comía yo. Las haré dichas rutas yo, pero como empresario autonomo.
    Y cuando vuelvas a bajar y te invito a unas tapas a pintxos ya me invitarás cuando yo alguna vez suba. Un abrazo amigo mio.

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